sábado, 13 de marzo de 2021

Francisco Fornet Ruiz, uno de los protagonistas en la construcción del nuevo movimiento obrero antifranquista en Sevilla.

Nació el 21 de Junio de 1929 en Dos Hermanas (Sevilla) y con solo 7 años comenzó a sufrir los duros golpes de la vida en el seno de una familia de la clase obrera en los años treinta: vivió la guerra que provocó el fascismo contra la República, la detención de su padre –jornalero anarquista- que fue encarcelado y recluido en el campo de concentración de La Corchuela, la represión a toda su familia, las torturas, los fusilamientos en El Barranco, el miedo, el hambre y el trabajo infantil en una huerta, en el Matadero Municipal y ya después con 14 años en un taller. Toda la familia trabajaba para adquirir algo de comida, ropa y calzado.

En Octubre de 1953 entró a trabajar en La Hispano Aviación (HASA) y en poco tiempo alcanzó la categoría de Oficial 1ª Tornero. Recorría diariamente 30 Kilómetros en una bicicleta para ir y volver del trabajo, entre Dos Hermanas y Triana soportó durante años el calor, el frío, la lluvia, el viento y hasta la nevada de Febrero de 1954. Ya en 1958 se compró una moto que le alivió el sacrificio del transporte.

En la fábrica entró en contacto con una célula clandestina del PCE que desde 1956 formaban Manuel Castillo Cobos, Jaime Montes Muñoz, Francisco Pico López, Rafael Gómez Gil, José Maldonado y Diego Aguilar. Al final de esa década se comprometió con la militancia comunista y aportó todo lo que pudo en el renacer del PCE sevillano.

La primera movilización tras la guerra y las dos décadas más grises de la dictadura, en Sevilla y Andalucía la protagonizaron los trabajadores de La Hispano que realizaron plantes, marchas lentas y manifestaciones por el centro de la ciudad durante una semana en Enero de 1959. Reivindicaban un incremento salarial después de que la empresa suprimió las horas extras, una prolongación de la jornada obligada por los salarios de miseria que se cobraban. Las acciones terminaron un día que la policía disolvió violentamente una manifestación y detuvo a varios trabajadores, hay que tener en cuenta que la participación en huelgas era delito de sedición.

En 1960 Francisco Fornet consiguió un logro importante al ser elegido enlace sindical cuando para la mayoría de los obreros aquellos enlaces estaban desprestigiados y no les representaban porque formaban parte de un sindicato impuesto por el régimen franquista y habitualmente eran designados por los empresarios dentro de un ambiente represivo en las fábricas y en la sociedad. Fornet se ganó la confianza de los compañeros y también fue vocal provincial. Supo ser pionero en la nueva política que el Partido Comunista promovía a nivel estatal y que estaba haciendo resurgir el movimiento obrero. La estrategia era dar la cara, aprovechar los escasos recursos legales y conseguir abiertamente el respaldo de los trabajadores a través de las elecciones sindicales.

Paralelamente surgieron las comisiones de obreros que se elegían en asambleas y reuniones a la hora del bocadillo para plantear a los patronos sus sencillas reivindicaciones. Magistralmente el PCE supo articular esa dinámica obrera espontánea y comenzó el despertar del movimiento obrero con nuevas formas organizativas donde las Comisiones Obreras eran el motor principal. En Sevilla un cuadro del PCE que a su vez era el enlace con el Comité Central, Juan Menor, movía clandestinamente los hilos de aquella reconstrucción obrera apoyándose principalmente en el Metal y en José Hormigo enlace desde 1958 en la empresa Balbontín. En el segundo semestre de 1962 se crea la 1ª Comisión Obrera en La Hispano Aviación que fue también la 1ª en toda Andalucía. Ahí estaban Eduardo Saborido, Fernando Soto, Benito Cisneros, Ismael Martel, Jesús Mancha, Antonio Linero, Manuel Aguirre, Antonio Domínguez, Francisco Pico, José Maldonado, Diego Aguilar…y por supuesto Francisco Fornet que además de acumular experiencia como enlace sindical era diez años mayor que los demás pues tenía entonces 34 años.

Las elecciones sindicales de 1963 supusieron dar un importante paso adelante para que la mayoría de los trabajadores en las grandes empresas participaran con su voto y respaldaran a los jóvenes que encarnaban el nuevo movimiento obrero organizados en las comisiones obreras. Dentro de las estructuras del Sindicato Vertical (CNS) también se produce una penetración en el 2º escalón del organigrama en las llamadas Secciones Sociales o UTT (Unión de Trabajadores y Técnicos), Fornet junto a Saborido, Soto y otros representantes metalúrgicos comenzaron a realizar asambleas en El Patio del Metal en la calle Morería que se convirtió en el foco y la referencia para todo el movimiento obrero sevillano. Así en 1964 de forma abierta crean la <Comisión de Vocales, Enlaces, Jurados y obreros metalúrgicos> y se plantean conseguir la Presidencia de la Sección Social proponiendo a Fernando Soto, algo que no se consiguió en esa ocasión pero si tres años después en 1966. En lo que sí coinciden varios historiadores es que 1963 fue el punto de inflexión que marca el final del túnel que el franquismo impuso a la clase obrera.

En La Hispano se crea el Jurado de empresa y se negocia con más fuerza el 2º Convenio Colectivo (Fornet había participado antes en la negociación del 1º pero se encontraba solo dentro de una representación sindical sumisa y fue presionado y chantajeado por la empresa para que lo firmara). La fuerza de los nuevos enlaces respaldados masivamente por las urnas se apoyaba en una plataforma reivindicativa elaborada en las asambleas por talleres y oficinas que recogía puntos elementales planteados directamente por los trabajadores, algo novedoso que rompía con la inercia de la imposición por parte de la empresa y configuraba plataformas asumibles y defendibles.

Por su parte las autoridades gubernativas acechaban a los obreros que destacaban como vanguardia y en una caída de militantes del PCE fue detenido Benito Cisneros –en 1963- aunque lo tuvieron que dejar en libertad dada su representatividad en la empresa.

En La Hispano se consiguieron algunas reivindicaciones y se supo combinar muy bien la negociación con movilizaciones puntuales donde participaban la mayoría de la plantilla. El hachazo a esta dinámica de lucha se produjo tras una huelga en Junio de 1965 en la que fueron despedidos 21 trabajadores. Fornet fue expulsado y al formar parte de las “listas negras” que manejaban los patronos no consiguió entrar en otra empresa (lo intentó en CASA, Landis, Butano,…) teniendo que montar con muchas dificultades un tallercito en su propia casa.

Allí en Dos Hermanas se dedicó al Partido y llegó a ser miembro del Comité Provincial de Sevilla. En París tuvo entrevistas con el Comité Central y en 1966 viajó a la U.R.S.S. Regresó algo desilusionado de aquel viaje y algún tiempo después las divisiones internas dentro del Partido en su pueblo minaban su moral comunista. La decepción por los resultados electorales de Junio de 1977 hizo que abandonara su militancia de dos décadas en el PCE.

Aunque en Diciembre de 1977 vuelve a vivir con alegría un acontecimiento obrero: la Amnistía Laboral que lo reincorporó a su puesto de trabajo en la Factoría de Tablada de Construcciones Aeronáuticas (CASA) y allí trabajó de tornero hasta su jubilación.

Su simpatía por el PCE e I.U. y su orgullo como metalúrgico que formó parte de la vanguardia obrera antifranquista la reflejó siempre entre sus compañeros de trabajo y entre los vecinos. Incluso ha participado en las redes sociales entre el 5 de Mayo de 2014 y el 16 de Febrero de 2017. Compartía artículos de revistas como Rebelión, denunciaba la manipulación mediática y expresaba sus opiniones ante afirmaciones que no le gustaban, es el caso de una publicación que hizo el 19 de Enero de 2017 y que transcribo a continuación:

Francisco Fornet Ruiz

<No creo que en los años 70 el PCE fuera una izquierda domesticada fuimos muchos los que pasamos por las cárceles franquista pero ante de decir que éramos una izquierda domesticada hubo un factor quizás el más importante a tener en cuenta antes de decir que fuimos una izquierda domesticada las dos primeras elecciones generales sacamos muy pocos diputados de 20 a 23 después de años de luchas muy duras en contra del franquismo y hubo una gran decepción, y a mi modo de ver, eso es lo que venimos arrastrando.>

 

Consultando libros y documentos sobre el movimiento obrero sevillano me ha sorprendido gratamente la mención del compañero Francisco Fornet Ruiz como uno de los impulsores de la reorganización de la lucha obrera –aniquilada desde los años de la guerra civil- así como el reconocimiento de su prestigio como representante de los trabajadores.

(Los datos y las fotos son del Archivo Histórico de CC.OO. de Andalucía).





















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